martes, 6 de septiembre de 2011

Vo-lar la frontera en un papalote cósmico

“Los papalotes se elevan cuanto mayor es el viento que se opone a su ascenso.” Eso es confrontar el cuerpo frente al entorno (natural y social).

El Istmo de Tehuantepec, a lo largo de la historia, y de manera cada vez más acentuada desde la colonización española, ha sido considerada por las autoridades políticas y los poderes económicos como un espacio de frontera, geográficamente divide dos espacios socio-económicos diferenciados: “el Norte” de “Centro América” (donde empieza el sur).  Por algo es la parte más angosta de la República Mexicana.

Las fronteras políticas han dividido a los pueblos indígenas y mestizos de Mesoamérica. Oaxaca con 47.9 por ciento de población indígena es el estado con mayor población indígena en Mexico.


El papalote cósmico es el barrilete para los guatemaltecos, es un cometa fronterizo, una simbiosis conceptual entre dos culturas: México y  Guatemala, dos cuerpos: hombre y mujer, dos etnias: indígena y latino. Papaplote proviene del náhuatl papálotl: ‘mariposa’. “Mariposo” un término que se utiliza para describir o etiquetar al gay de pluma. Estos mismos términos que pueden esconder una connotación peyorativa los podemos cargar de poder suvirtiendolos en su intencionalidad y así utilizarlas como palabras de poder dentro de nuestras luchas.

Papalotes de Francisco Toledo

Los aztecas creían que las almas de sus guerreros se convertían en mariposas al morir. Por tanto podríamos considerar que la muestra esconde el significado de un Guerrero Mariposo.


El elemento del barrilete es el cuerpo, en una cruz. Está lleno de símbolos  culturales y poderes heredados con connotaciones espirituales. Es el medio para comunicarse con el mundo de los muertos. Representa una frontera que permite estirar la vida.

Por eso es un papalote “cósmico”, porque es de otro lugar, ese tercer lugar entre nuestro planeta y otro mundo. Por tanto el barrilete, en su uso ritual, es algo que va más allá de lo ordinario: es extraordinario en cuanto permite un intercambio, al menos como idea, entre la vida y la muerte como la entiende los pueblos de Mesoamérica .

Fly-a-kite / Bansky

El barrilete no encuentra fronteras en el cielo porque el cielo no tiene límites.

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